En la Cámara de Diputados, integrantes de la bancada del Partido Revolucionario Institucional (PRI) exigieron al Gobierno Federal que se revelen las cifras reales de las personas desaparecidas en el país.
Lo anterior, ante el hallazgo de fincas, ranchos y sitios en distintos puntos de la República, utilizados por el crimen organizado para reclutar, adiestrar y desaparecer personas.
La diputada Leticia Barrera expresó que el territorio nacional se ha convertido en un “cementerio”, ello, al referirse al hallazgo del “campo” de entrenamiento de grupos del narcotráfico, ubicado en Teuchitlán, Jalisco.
La congresista indicó que tras reunirse con integrantes de colectivos de personas buscadoras de desaparecidos, éstas pidieron que sus reclamos y exigencia de justicia y verdad se difundan desde el Palacio Legislativo, para que lleguen hasta Palacio Nacional.
“Nos han pedido que seamos la voz desde aquí, de esta tribuna, para que el gobierno asuma la responsabilidad que ha dejado de hacer durante estos siete años. No podemos nosotros ser omisos ante la grave situación que estamos viviendo, México se está convirtiendo en el cementerio más grande del mundo”, expresó.
La congresista subrayó que sucesos como el referido, son muestra, entre otras problemáticas, de la falta de coordinación entre los distintos ordenes de gobierno para enfrentar a la delincuencia organizada, atender a las víctimas y hacer justicia.
Recalcó que las madres buscadoras, sus familiares y los colectivos a los que pertenecen, han sido ignoradas por autoridades municipales, estatales y federales.
Añadió que los hechos en Jalisco, muestran que son reales los señalamientos respecto a que al menos el 30 por ciento del territorio nacional está controlado por la criminalidad.
Pidió no olvidar que en el país la impunidad es de más del 90 por ciento, ya que más de 9 de cada 10 delitos no se denuncian y un número ínfimo de los casos que se reportan a la autoridad, derivan en sanciones a los culpables.
Seguir las pistas
Por su parte, el coordinador de la bancada tricolor, Rubén Moreira demandó que las autoridades de todos los órdenes de gobierno sigan los rastros que quedaron en lugares como el llamado “campo de exterminio” en Jalisco.
“Y ahí hay rastros que hay que seguir, ¿quién preparó a esos entrecomillados maestros, y quién los formó en esas prácticas de tortura?, que parecieran aquellas que se utilizaban en la guerra sucia”, dijo.
Recalcó que hay omisiones en la atención al drama de las desapariciones en el país, y muchos gobernadores y gobernadores no se involucran en la resolución del problema.
Moreira Valdez manifestó que si bien se percibe un cambio en la estrategia federal de seguridad, aún se cometen errores como emprender acciones emergentes y sin planeación a mediano y largo plazo, aunado a que se siguen ocultando las cifras del delito a nivel nacional.
“Me preocupa que algunas acciones sean de relumbrón, que la estadística se esté falseando, una estadística falsa y también me preocupa que los gobernadores no participen y no lo digo por el señor (Pablo) Lemus, el señor Lemus está entrando acá apenas y me parece bien que hay hecho sus secretaría para la búsqueda de personas desaparecidas, entonces no lo digo por él, pero creo que muchos gobernadores tienen que actuar”, opinó.
Adiós a “abrazos, no balazos”
Pese al horror, el exgobernador de Coahuila agregó que es positivo el cambio en la estrategia de seguridad federal, que está dejando atrás la afrenta de los “abrazos no balazos” del sexenio anterior.
“Hay una cosa buena en esto, ya se canceló ese tema de los abrazos que era una afrenta a México y una afrenta a las víctimas, yo espero que tengan eficacia” en las medidas impulsadas por la administración federal y su gabinete de seguridad”, recalcó Moreira Valdez.